Por un tema de logística y sobre todo de comodidad, el plantel “santo” llegó al aeropuerto “Benjamín Matienzo” tres horas antes del vuelo -programado para las 20.45- que lo llevaría hacia Buenos Aires. Esta tarde, a partir de las 17, enfrentará a San Telmo en la Isla Maciel.
“No conseguíamos un vuelo en otro horario que nos permitiera viajar todos juntos. La otra opción era salir en colectivo el viernes a la noche. Así que por una cuestión de comodidad lo pasamos para hoy”, explicaron en el cuerpo técnico.
Tras llegar a Capital Federal, San Martín solo tuvo tiempo para hacer el check-in en el hotel, cenar y descansar. Esto último, fundamental para llegar en óptimas condiciones al partido, según explicaron los protagonistas en diálogo con LA GACETA. “En el fútbol, la concentración siempre es muy importante. Es donde haces tus actividades, te cuidás con la alimentación y descansás bien. Viajando sobre la hora no damos ventaja de nada ni tampoco tenemos beneficios”, resumió Nicolás Carrizo. “A Buenos Aires siempre está la preferencia de viajar en avión. Si lo hacés en micro llegas cansadísimo. Te lo digo porque ya me pasó”, agregó el arquero de 31 años.
Así como de gustos se trata, hay algunos jugadores que prefieren viajar un poco más temprano. Tal es el caso del capitán Federico Bravo, que mientras tomaba un café junto a Gervasio Nuñéz miraba por TV el triunfo de Racing sobre Sarmiento por 1 a 0.
“Para cada jugador es diferente. A mí sí me gustaría salir un poco más temprano. Sin embargo, al dormir bien y levantarse tranquilo en el hotel te da la pauta de que vamos a llegar al 100%. Estamos tranquilos y mentalizados”, sostuvo el “5”.
Durante el tiempo de concentración los jugadores realizan diversas actividades, tanto esperando en el hotel como en las prácticas previas a un partido. “Lo vivimos tranquilos. Todos tenemos ganas de jugar, pero hasta que no rueda la pelota nos mantenemos cautos”, señaló Enzo Martínez. “Aprovechamos este tiempo de estar todos juntos para charlar y darnos consejos del día a día. Mantenemos una buena relación”, añadíó.
Agustín Colazo, acompañado de su kit matero, también ponderó la importancia de ese tiempo que tienen los futbolistas para terminar de pulir detalles. “Son dos horas que se pasan rápido, llegamos y descansamos. Es muy importante porque eso se nota en la cancha y te mantiene concentrado”, comentó el ex Belgrano. “El mate está siempre, acompañado de música. Sobre música escuchamos de todo, cada uno en su pieza”, añadió.
Sin excusas
Al tanto de lo que se dice sobre las medidas de la cancha en la Isla Maciel, los jugadores avisaron que dejarán todo para volver a Tucumán con el puño en alto.
“No subestimamos a nadie, nos adaptamos de la misma manera para enfrentar a cualquier rival. En la categoría, todos los partidos son duros”, advirtió Franco Meritello.
“La cancha no la conocemos mucho, pero tenemos que ir preparados porque va a ser una guerra”, anticipó “Yacaré” Nuñez, quien al igual que todos en La Ciudadela espera regresar con la victoria.